MEDITACIONES
Luna Nueva
La luna nueva se produce cuando el Sol (consciencia) y la Luna (sustancia material, cuerpo, emociones) se unen en el cielo, por eso ambos astros están en el mismo grado del mismo signo. Es un momento donde alma y cuerpo se reúnen para despertar a la consciencia determinada energía. Ese día se abre un ciclo de seis meses que se cierra cuando luna llena se produce en ese mismo signo; por eso es buen momento para sembrar intenciones, para el repliegue y la introspección. Cada meditación de luna nueva es en un signo diferente del zodíaco y hacerlas te va a ayudar a integrar cada una de las 12 energías a lo largo del año. Podés hacer las meditaciones anteriores cuando quieras activar la energía de un signo o cuando lo sientas.
Luna Nueva en Tauro: “Reconocer, Valorar y Merecer”
Luna Nueva en Virgo: “Hago una check list de autolimpieza. Activo el GPS personal”
Luna Nueva en Libra: “Soy en vínculo. Me integro para abrirme a los vínculos con otr@s sanamente”
Luna nueva en Escorpio: “Me transformo incluyendo mi sombra”
Luna Nueva en Sagitario: “Me expando conscientemente”
Luna Nueva en Capricornio: “Soy autorresponsable, me sostengo y me protejo”
Luna Nueva en Acuario: “Me abro al cambio, innovo y me conecto”
Meditaciones para hacer
Luna Nueva en Tauro: “Reconocer, Valorar y Merecer”
Luna Nueva en Virgo: “Hago una check list de autolimpieza. Activo el GPS personal”
Luna Nueva en Libra: “Soy en vínculo. Me integro para abrirme a los vínculos con otr@s sanamente”
Luna nueva en Escorpio: “Me transformo incluyendo mi sombra”
Luna Nueva en Sagitario: “Me expando conscientemente”
Luna Nueva en Capricornio: “Soy autorresponsable, me sostengo y me protejo”
Luna Nueva en Acuario: “Me abro al cambio, innovo y me conecto”
Luna Llena
La Luna está llena cuando está exactamente enfrente del Sol, por lo tanto están ubicados en signos opuestos (Aries-Libra, Tauro-Escorpio, etc.). El Sol (consciencia) proyecta su luz en la Luna (sustancia material, cuerpo, emociones). Estamos en condiciones de ver con más claridad la forma que cobró aquello que se inició seis meses atrás en la luna nueva y de darle un cierre. Es momento de plenitud, de cosechar la siembra y de celebración. La luna llena nos invita a integrar las energías de los signos opuestos complementarios para vivirlos en dinámica de polaridad. Es aconsejable meditar en luna llena porque hay mucha carga emocional en el cuerpo y cuando no la drenamos puede generar dolor de cabeza, irritabilidad, embotamiento o cansancio. Es buen momento para limpiar los cristales y poner agua bajo la luz de la luna para cargarla.